Día 8 Marree

 Y por fin empieza lo bueno, hoy empezamos el día antes de lo normal, cierran el desayuno a las 8!!! Asi que a madrugar. Tras desayunar y terminar de preparar todo, ponemos rumbo a Marree, 380 km, de los cuales los 80 últimos serán ya en carretera de tierra. Ya desde primera hora se nota que va a ser un día caluroso, apenas nos alejamos de la ciudad y cogemos la carretera hacia el outback y ya el termómetro marca 32ºC. Nos vamos adentrando en el desierto, esto todavía son las afueras pero desierto al fin y al cabo, mucho arbusto y tierra. Se ven bastantes animales muertos tirados en la carretera, algunos de hace no mucho, apenas hay trafico asi que son fáciles de esquivar, ya hasta intuimos donde nos vamos a encontrar uno solo viendo a los buitres volar en círculos a lo lejos. Hacemos la mitad del trayecto hasta llegar a Parachilna, un pueblo en medio de la nada, a partir de ahora cada vez que diga pueblo, no piensen en un pueblo como en España, sino un bar, eso es innegociable, y luego a elegir, gasolinera (dos surtidores y barraca/oficina) o motel, aunque esteúltimo puede   ir integrado en el bar... Y NADA MAS!! Pues lo dicho, parada técnica para cambio de conductor, ir al baño y tomar algo, nada más bajar del coche vivimos en nuestras carnes lo que tantas veces había leído en foros sobre el outback y la pesadilla de las moscas, caminas rodeado por una nube de unas 30/40 moscas que orbitan a tu alrededor y además no se van ni espantándolas, es realmente agobiante y desesperante, se posan en las gafas, en tu cara, en todas partes, intenté sacar una foto del lugar, imposible, no te dejan en paz asi que rápido al baño y las fotos desde dentro del coche. 

Esto es un pueblo

Nos queda la mitad del camino, vamos tranquilos pues tenemos tiempo de sobra, por el camino nos cruzamos los primeros trenes de carretera, grandes camiones con hasta tres remolques enganchados, una pasada... Y adelantarlos una pesadilla.

Tras unos 100km de repente se acaba el asfalto y entramos en carretera de tierra, eso si, en buen estado, dejamos distancia con el coche que nos precede para no comernos el polvo que levanta y por fin llegamos a Marree, esto debe ser un pueblo importantem tiene todo lo anterior pero dos moteles y una cancha de baloncesto... Y una estación de tren abandonada con varias locomotoras también abandonadas, que por suouesto visitaremos luego, dan un poco de miedo y eso nos gusta. Entramos al bar que a la vez es recepción, no hay nadie salvo el camarero y la dueña del motel, nos registramos y comemos, el menú noes muy variado, hamburguesa o hamburguesa asi que nos pedimos una hamburguesa, estaba rica todo hay que decirlo. 

Nos alojan en una especie de contenedor pero que está bastante bien, vamos que tiene tv, baño y aire acondicionado, lo justo para sobrevivir aqui. Son ya las 3 de la tarde y el calor aprieta asique es el momento de recuperar una gran tradición española, la siesta, que bien sabe. Tras descansar Raúl sale a la piscina pero su aventura dura poco ya que la presencia de una araña muerta del tamaño de su mano es demasiado para el que presa del pánico abandona la idea. 

Ya cae el sol y el calor no es tan fuerte asi que damos una vuelta por los alrededores, sacamos unas fotos y vemos como una hormiga arrastra una araña el doble de grande que ella, aqui todo es muy bestia.

Al caer la noche y ante la falta de contaminación lumínica y que aún no ha salido la luna, la vista es espectacular, es posible ver la vía láctea a simple vista, una pasada. Bueno ya es hora de descansar, mañana son solo 200km hasta William Creek, por la Oodnadatta track, un lugar aún más remoto que este, promete la verdad, de hecho en esa carretera no hay mas servicios ni nada hasta 200km como bien advierte la señal. Parece que habrá suerte y el tiempo nos acompaña, no se preveen lluvias, aqui una lluvia sería fatal pues se llenaría todo de barro, pero bueno, vamos preparados. Mañana es muy posible que no tenga internet pero bueno si no, al dia siguiente os lo cuento todo junto.

Hasta Mañana!!